Hace un tiempo ya os hablé del hotel Praktik Metropol , hotel donde me alojé en una reciente visita a Madrid. 
Y en esta ocasión, la visita era a Barcelona, así que no pude evitar caer en uno de la misma cadena y aprovechar su apertura. 
Cuando me propusierón hospedarme en él, comentándome que estaba enfocando al mundo del vino no pude menos que sonreír, 
¿Os imaginaís una riojana en un hotel llevo de vino?
Pues eso, aunque entre tu y yo, te diré que no es una de mis bebidas favoritas jeje 



El hotel Praktik Vinoteca no puede estar mejor situado, justo en el corazón Barcelones, en la Calle Balmes, dos manzanas detrás de la Casa Batlo así que imaginar si esta céntrico.
Una zona llena de edificios modernistas, art noveau y las mejores tiendas si tienes un billetero abultado: Chanel, Loewe, Dior, Miu Miu...

La entrada ya nos resulto increíble, esas lamparas, esos sillones de cuero, botellas por todos los sitios, y por supuesto todos los detalles cuidados.

La Recepción esta concebida como un mostrador de bar, muy acorde con la temática del hotel. 
De hecho, uno de los detalles que el hotel Praktik Vinoteca tiene para con sus huéspedes es la gentileza de una copa de vino en su recepción, así como la posibilidad de asistir a las diferentes catas que desarrollan una vez a la semana.






El pasillo que dirige a la terraza aún en construcción de la que pude entrever unos increíbles suelos de baldosas hidráulicas,, esta lleno de un original papel lleno de etiquetas de vino, y por supuesto su zona de internet, periódicos y libros para sus huéspedes no me pudo llamar más la atención.



¿Os habéis fijado en el juego de luces con el botellero? Por supuesto están vacías, pero me encanta como la iluminación se funde con el vidrio.
Además, en cajas de madera vinícolas, hay a disposición de los clientes libros para hacer su estancia más agradable.

En cuanto a la habitación, son habitaciones no muy amplias, pero tampoco pequeñas ni estrechas.
Una impresionante cama y un cabecero frontal de madera que ocupa prácticamente toda la pared dejan paso a un pequeño bacolcinto. 
El concepto de hotel de turistas es apenas dormir y pasar el menor tiempo en el hotel, de modo que su función de descansar cómoda y plácidamente bien lo cubren.
Buena televisión, armario empotrado y baño separado de la ducha completan la estancia.



La ducha era impresionante, una alcachofa (creo que se dice así) de esas cuadrada que cae como si fuese lluvia... Un placer después de una día de mucho turisteo.
Pero a pesar de que repetiría sin dudarlo, tengo que decir que el baño de nuestra habitación me pareció pequeño, ya que eche de menos una encimera o un espacio donde poder depositar el neceser, si bien había una pequeña balda para las cosas básicas.
Bueno, es que yo creo que mis cosas básicas son muchas pero si que me gustan los baños un poco más espaciosos.

Nos ha encantado la experiencia, el trato exquisito, la ubicación perfecta, las habitaciones cómodas, la decoración un 10, sin duda el hotel Praktik Vinoteca es una muy buena opción si teneís pensado visitar la ciudad condal.

¡Ah! ¿y que me decís de las vistas desde el balconcito?

Feliz Lunes ❤

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¿Os habéis fijado en los tejados?
Es algo que me encanta de los edificios antiguos.

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