Tengo que reconocer que he sido muy afortunada en mi vida.
He tenido la suerte de conocer a mis 4 abuelos, y he podido disfrutar de ellos muchísimo tiempo, de hecho, mis abuelas aún viven, lo que me hace ser aún más privilegiada si cabe. 
Aunque he de reconocer que ahora no paso tanto tiempo con ellas como quisiera, siempre han estado ahí.


Hoy os quiero contar un poco más de esas 4 personas que han cuidado de mí, de mi hermana y de mis primos prácticamente todos los veranos de mi infancia y adolescencia, ya que he tenido la suerte de tener dos pueblos donde pasar los veranos.


Los pueblos, son lugares mágicos, donde eres libre, coges tu bici y vas rauda y veloz entre caminos de piedras, quedas con tus amigos en la plaza, te bañas en el río, aprendes a saborear la libertad, como huele esa sensación, y sin darte cuenta, según creces, te das cuenta de lo importante que ha sido para ti, para tu crecimiento y para tu personalidad el hecho de haber tenido pueblo.

Dado que hoy es 1.4.14, me ha parecido  una fecha preciosa para compartir con vosotras 14 anécdotas sobre mi afortunada infancia y la suerte que he tenido de poder ser libre, inocente y feliz.

❤ 14 . Mi Abuelo M, me enseño a andar en bici. Dábamos vueltas a la casa hasta que me di cuenta que me había soltado e iba yo sola.

❤ 13. Al poco, me sentí muy "crecidita", así que baje al río yo sola, y subí con la bici en una mano, y una uña arrancada de un dedo de la otra. No os asustéis, se llaman "Marcas de Guerra". Eso si, el susto que le di a mi Abuela L fue monumental.

❤ 12. Mi abuelo F, por las noches, nos sacaba a mi hermana y a mi al "payo", que es una especie de banco de piedra adherido a las casas, y ahí sentados, nos enseñaba las estrellas, las constelaciones...
El pueblo esta en lo alto de un valle, así que no os digo el cielo que había. Aún lo recuerdo.

❤ 11. Mi Abuela M, antes, nos había preparado para cenar tortilla de patatas, le salían buenísimas, y encima nos las hacia pequeñitas para nosotras, siempre ha sido muy chiquillera.

❤ 10. Una vez, cuando había nevado, mi Abuelo M, salió a la calle, cogió una bola de nieve, y la metió en el horno, nos dijo que si queríamos merendar nieve, pero obviamente se derritió en el horno. Así descubrimos que era agua.

❤ 9. Mi Abuela L, tenia dos lecheritas, una de metal y otra de plástico color mint con la tapa blanca (era una moderna), y cuando había que ir a por la leche, y me tocaba a mi, siempre me daba mi lecherita, y yo cuál Heidi, ahí que cruzaba la plaza para ir a por ella.

❤ 8. Los domingos, cuando íbamos al pueblo, Mi Abuelo F, me daba un balde vacío para que fuese al pilón de las vacas a coger renacuajos, yo iba supercontenta, metía la mano en el pilón o me metía yo misma, y cogía renacuajos. Ahora lo pienso y no se como me metía en ese pilón lleno de verde pero de niña las cosas se ven distintas.

❤ 7. Al llegar a casa, Mi Abuela M, metía mis renacuajos en una especie de pecera, me los guardaba para el domingo siguiente, pero no se que pasaba, que el siguiente domingo, los renacuajos ya habían crecido y se habían ido, así que me volvían a dar el cubo e iba a por más.

❤ 6. No soy mucho de café, pero me encantaba ver a Mi Abuelo M preparar el famoso café bombón,  leche condensada en esos vasos de cristal con rayitas en medio, creo que eran de duralex o arcopal...

❤ 5. Cuando íbamos a casa de Mi Abuela L, siempre había arroz y pollo para comer, nos sentábamos toda la familia a la mesa, los mayores a un lado, los niños a otro, esas comidas familiares y multitudinarias...

❤ 4. Una vez, hicieron un documental sobre Mi abuelo F, que fue entre otras cosas carbonero de encina. El video lo perdimos, y hace unos meses, lo encontramos por casualidad en Youtube, fue un shock la verdad, porque nos dejo en 1991 y volver a oirle y verle moverse... es como si no se hubiese ido nunca.

❤ 3. Mi abuela M, aún vive, tiene 94 años, y aunque su cabeza va por otros lares, siempre se acuerda de mi cuando le digo "abuela no te vayes, no te vayes" que es como le decía de pequeña.

❤ 2. Mi abuelo M, también se fue, en 2005, y aunque ya estaba muy malito, siempre me acordare de sus chistes, fue un visionario, una de sus frases más celebres era "En España, lo que sobra es vicio y corrupción", si levantase la cabeza ahora, seguro que repetiría "¿ves como tengo razón?"

❤ 1. De Mi abuela L, que también vive y en mayo hará 91, siempre me han fascinado sus vajillas, tanto que de pequeña, le pedí unos platos en herencia anticipada y como comprenderéis los guardo con muchísimo cariño.

Si habéis llegado hasta aquí, habréis visto que no es el típico post de belleza, ni de manualidades, es más un ejercicio de reflexión, una recopilación de acontecimientos por los que tengo que dar gracias, y un reconocimiento a 4 pilares de mi juventud.

Y aunque nos expongamos un poco más y abramos un poco más nuestro corazón, os animo a que lo hagáis, descubriréis anécdotas que os volverán a hacer sonreír.

Feliz Martes ❤

Post Data
Si alguna quiere ver el documental sobre mi abuelo
esta en Youtube